La plataforma de renta corta Airbnb planea un cambio en su modelo de negocio hacia el alquiler de vivienda a largo plazo y de automóviles, según ha revelado su director ejecutivo, Brian Chesky, en una entrevista con el diario británico Financial Times.
Chesky señala que desde el próximo año, la empresa de alquiler online de vivienda vacacional miraría “más allá de su negocio principal”, incluyendo una ampliación de servicios y experiencias.
Además, avanza más cambios, previstos para el siguiente mes de noviembre, que marcarían la “mayor actualización de Airbnb jamás realizada”. “Viajes es nuestro punto ideal”, indica en la entrevista. “Eventualmente, la gran frontera para Airbnb es ir más allá de los viajes… hay una oportunidad eventual para Airbnb de convertirse en una gran parte de tu vida diaria. No solo una o dos veces al año”, declara al medio anteriormente citado.
Asimismo, indica que ofrecer alquileres de hasta un año representa “una gran oportunidad” y que dado que solo el 18% de las reservas brutas por noche en el segundo trimestre de este año 2023, provienen de estancias de más de 30 días, se puede hacer más en este sentido. Las estancias prolongadas de más de tres meses son aún más raras, dijo.
Chesky también resalta que en un mundo pospandémico hay un mercado sin reconocer de estancias de un mes, dos meses o tres meses, ya que la gente puede trabajar desde sus ordenadores portátiles y viajan todo el verano. Por otro lado, al igual que expandirse hacia alquileres a largo plazo, Airbnb busca también ser proveedor de “cosas que hacer en tu viaje”, indica el directivo.
En la entrevista, subraya que hay una larga lista de ideas que se están considerando en la compañía, incluido el alquiler de coches o restaurantes ‘pop-up’ (servicios emergentes de restauración).
“El segundo activo más importante en la vida de una persona, después de su casa, es su coche”, apunta Chesky, por lo que lo que sugiere que el siguiente movimiento de la empresa sería hacia este modelo. El director ejecutivo anticipa esta estrategia en un momento en el que el modelo de negocio de Airbnb se encuentra bajo presión de legisladores en todo el mundo por el agotamiento del parque de viviendas en las grandes ciudades, resalta el diario británico.
Como ejemplo, cita la regulación en Nueva York, donde Airbnb tiene uno de sus más grandes mercados y donde se ha introducido recientemente una norma que limita la libertad que tienen los residentes para alquilar a través de la plataforma, eliminando alrededor de tres cuartas partes de sus listados en la ciudad.
Chesky señala que no ve esta situación en Nueva York como un “precedente” para la empresa. “La mayoría de la gente en la ciudad de Nueva York y más allá sienten que hay absolutamente una situación en la que todos ganan”, afirmó. El jefe global de políticas y comunicación de la compañía, Jay Carney, predijo que la política implementada en Nueva York no resolvería la crisis de vivienda, y que los precios de los hoteles en la ciudad se dispararían, mientras que “los turistas con un presupuesto limitado no podrán venir a Nueva York”.